Decálogo para un césped perfecto (I)


Si tienes un jardín con césped seguro que te encantaría que luciera verde y vistoso. Esto puede lograrse de forma fácil si le das los cuidados que necesita. Por eso, hoy te mostramos un breve decálogo para conseguir un césped perfecto ¡Toma nota!

  1. Tronzado regular. Tronzar o cortar el césped de forma regular es vital si quieres conseguir un césped perfecto. Es mejor cortarlo poco y a menudo que mucho y de una sola vez. Cambia la dirección y el patrón de corte cada vez para que las raíces de la hierba no se presionen en la misma dirección. La regla de oro para el tronzado del césped es reducir el tallo aproximadamente a la mitad o dos tercios, cerca de 5 cm.
  2. Abonado. Desde el principio de la primavera y durante el verano se recomienda abonar el césped cada 4 o 5 semanas para lograr un crecimiento óptimo. Un césped perfecto necesita nitrógeno, potasio y fósforo. En el marcado existe una gran variedad de productos específicos para abonar el césped.
  3. Riego. Un riego adecuado es fundamental para que el césped adquiera una tonalidad verde intensa y se vea lustroso. Puede realizarse de forma manual o automática y su frecuencia dependerá de la temperatura y la humedad. Cuando la hierba adquiere un tono azulado y grisáceo y algunas hojas se rizan o marchita, es señal de que el césped necesita agua.

Aún quedan dos cuidados fundamentales para el césped perfecto: el control de las malas hierbas y el escarificado y la aireación. Pero de esto hablaremos en el próximo post, así que no te despegues del blog.


Fuente de la información: Gardena

El riesgo de infección por legionella se incrementa en verano


La legionella es una bacteria presente en la naturaleza que vive en ambientes húmedos y calurosos como ríos, lagos, corrientes y aguas termales contaminadas de las que hacemos uso (torres de refrigeración, suministros de agua potable, humidificadores…). Existen unas 40 especies distintas de esta bacteria.

La infección por legionella provoca dos tipos de enfermedades: 


  • La fiebre de Pontiac. Es la forma más leve y frecuente, similar a una gripe y de buen pronóstico.

  • La enfermedad del legionario. Es un tipo de neumonía que se contrae debido a una infección por legionella y afecta al estado de salud general. Aunque esta es la forma más grave, los brotes epidémicos no son tan frecuentes.

Debido a que el riesgo de infección por legionella se debe a su presencia en los depósitos de agua con los que los humanos entramos en contacto, las probabilidades de contraer esta enfermedad aumentan en verano. Por ello, la prevención y el control de esta bacteria es una actividad vital que se sustenta en el mantenimiento adecuado de las instalaciones de reservas acuíferas y su desinfección por parte de técnicos profesionales.

En Servace hemos creado una división especializada en la prestación de servicios integrales a las comunidades en la que ponemos a tu disposición, entre otros, servicios de control de plagas. Tenemos un nuevo catálogo de servicios ¡Consúltalo!

Conserjes y porteros ¿Son lo mismo?


En el post anterior te enseñamos cuáles son las características que debe cumplir un buen conserje. En esta línea, hoy queremos enseñarte la diferencia entre conserjes y porteros, porque ésta es una duda habitual en las comunidades de vecinos que deciden contratar una figura de este tipo para su comunidad de propietarios.

La diferencia fundamental entre conserjes y porteros es que estos últimos viven en el edificio de la comunidad para la que prestan sus servicios, donde disponen de una casa o habitación. Por tanto, la organización del trabajo para los porteros es mucho más flexible que para los conserjes, ya que al pernoctar en la comunidad sus horas de descanso pueden verse interrumpidas por situaciones de emergencia.
Por otro lado, el conserje implica una cierta estabilidad en la persona que desempeña la tarea, ya que a medida que se va ganando antigüedad es normal un cierto acomodo al puesto y un creciente desinterés en el desarrollo de sus funciones.

Durante los últimos años, se está produciendo una desaparición paulatina de porteros y conserjes. Son muchas las comunidades que tras la jubilación o el despido de una de estas figuras deciden sustituirla por una empresa externa de servicios auxiliares. Esto responde a motivos tanto económicos como de eficiencia funcional.


Para que seas tú quien decidas si prefieres tener un conserje en tu comunidad o que una empresa se haga cargo de sus funciones, en Servace te ofrecemos las dos opciones: ponemos a tu disposición todo tipo de servicios auxiliares que pueden requerirse en una comunidad (limpieza, jardinería, piscinas…) y también conserjes y porteros. Y es que hemos creado una división especializada en comunidades para darte los mejores servicios. Visita nuestra web y consulta qué te ofrecemos.


Fuente de la información: RevistaInmueble

START TYPING AND PRESS ENTER TO SEARCH